A los nueve años, el talento como pianista de la pascuense Mahani Teave fue descubierto por Roberto Bravo, uno de los músicos más importantes de Chile.
Desde ese entonces, Mahani siguió los consejos del maestro y se unió al exigente Conservatorio de Música de la Universidad Austral. Ahora, con 34 años, es una respetada figura de la música clásica nacional.
El vínculo de Roberto Bravo con los jóvenes ha sido uno de sus sellos distintivos. Ahora, el artista nacional jugará un importante rol dentro de la educación superior.
A sus 73 años, trabajará en la UTEM y a través de conservatorios y conciertos guiará a los jóvenes de liceos públicos en su próximo paso a la universidad, bajo el Programa de Acompañamiento y Acceso Efectivo a la Educación Superior (Pace).
Política de educación integral
Implementado por el Gobierno de Michelle Bachelet el 2014, el Pace se enmarca en la Reforma Educacional, y pretende restituir el derecho a la educación superior a estudiantes de sectores vulnerables dotándolos de preparación académica y orientación vocacional.
Este sistema es implementado por distintas universidades del país. En el caso de la UTEM, la casa de estudios apadrina a 12 liceos de la Región Metropolitana de comunas como La Granja, Peñalolén, Quinta Normal, Curacaví, Colina, entre otras.
Los conciertos serán un pretexto para hablar de temas valóricos con los jóvenes
A partir de su más de 50 años de experiencia en la música, Bravo pretende acercarse a las nuevas generaciones con su talento; y poder, desde la creatividad, entregarles herramientas para su futuro. “Los conciertos son un pretexto para hablar de temas valóricos con los jóvenes”, sostuvo.
Roberto Bravo, quien se ha presentado con la Orquesta Sinfónica de Berlín y la Orquesta Filarmónica de Londres, aseguró que “no se pueden crear estudiantes solo con conocimientos técnicos sin abrir un espacio para el alma, la sensibilidad y el acercamiento al mundo de la belleza. La música es una de las mejores herramientas para tocar el mundo de las emociones”.