A finales del 2016, Javier Escudero, Ingeniero Civil Industrial y académico de la Universidad Tecnológica Metropolitana, tuvo una inquietud.
Le interesaba que sus estudiantes salieran de la sala de clases. Pero no por algo negativo; quería que empezaran a poner en práctica en el mundo profesional todo lo que han aprendido, ya que pronto serán la nueva generación laboral.
Javier Escudero y los estudiantes del proyecto
El primer semestre del 2017, Javier Escudero consiguió su objetivo. Bajo la metodología de Aprendizaje + Servicio de la Utem, que vincula los logros de aprendizaje curriculares de las asignaturas con el desarrollo de un servicio en un entorno real, siete alumnos del curso Sistemas de Administración vivieron la experiencia.
La idea era contribuir a una repartición pública, principalmente en una municipalidad. “No todas la municipalidades tienen los recursos para mejorar sus sistemas, y si estos logran un avance, finalmente se traduce en una mejora para las personas que viven en esa comuna”, señala Escudero.
Luego de un acuerdo con la Asociación de Municipalidades de Chile (Amuch), el grupo liderado por el docente trabajó con la Municipalidad de Algarrobo.
“En la Municipalidad buscan rediseñar sus plantas de personal con el propósito de mejorar la gestión del municipio. Para eso se necesitaba conocer los procesos de cada una de las actividades antes de hacer un diseño estructural”, señala Escudero.
Los estudiantes que participaron fueron Juan Ernesto Montoya González, Maximiliano Augusto Lira Farías, Juan Pablo Miranda Quijada, Claudio Alcamán Morales, Enzo Savareces Franco, Marco Pérez Vergara y Vania Reyes López. Además participó la docente Yohanna Palominos Marín de la asignatura Ingeniería de Sistemas
Las patentes comerciales
Luego de meses de trabajo, el equipo de la Utem, en conjunto con la autoridades del municipio detectaron que uno de los principales problemas estaba en la Unidad de Patentes Comerciales.
“Una fuente importante de ingreso para el municipio es el pago de patentes comerciales, todo lo que es negocios de comercio establecido, de emprendedores y profesionales. Por lo tanto, ellos sabían que tenía que mejorar eso”, sostiene Escudero.
La Municipalidad de Algarrobo se enfrentaba al problema de que muchas personas que invertían en una actividad comercial, instalaban su negocio antes de hacer el trámite para obtener la patente comercial.
De esta manera, el grupo de estudiantes, liderados por su profesor, intervino en la Unidad de Patentes Comerciales. El trabajo contempló un diagnóstico de sus problemáticas y, de acuerdo a Escudero, “detectamos que no tenían definidos un proceso de gestión para estas actividades relacionadas a las patentes”.
“Conversamos con ellos, y trabajamos en hacer un levantamiento de proceso, el que será un insumo para que puedan tomar decisiones en sus diseños organizacionales”, agrega.
El trabajo tuvo una alta valoración para el municipio. Tanto así, que ahora se continuará evaluando otros procesos estratégicos de la municipalidad.
La experiencia que vivieron los estudiantes fue valorada por las municipalidades y en especial por Escudero, quien señala que “es muy importante ver cómo las competencias y logros de aprendizaje qué reciben en las aulas permiten solucionar los problemas reales que tienen las empresas”.
Y agrega que “esto sirvió muchísimo para que no se queden con la idea del profe de la asignatura, sino que sean partícipes del aprendizaje y poder confrontar una realidad del ámbito laboral empresarial y aportar mejorar al mismo”.