En más de una oportunidad desde Chile se han enviado satélites a la órbita con distintos propósitos, como por ejemplo explorar el espacio y mejorar las telecomunicaciones satelitales.
Es el caso de la Universidad de Chile y la Fuerza Aérea de Chile (FACh), entidades que ahora decidieron unirse para impulsar un ambicioso programa espacial.
Según lo señalado por El Mercurio, el rector de la U. de Chile, Ennio Vivaldi, y Comandante en Jefe de la FACh, General del Aire Arturo Merino Núñez, firmaron un convenio para unir esfuerzos y equipos en la creación de un sistema espacial colaborativo.
El acuerdo busca potenciar el desarrollo tecnológico, las telecomunicaciones satelitales, la ciberseguridad y la información geoespacial. Y es que en las últimas décadas, ambas instituciones impulsaron proyectos en los que colocaron satélites en la órbita.
En el caso de la FACh, en 1995 trabajaron con una empresa británica y enviaron el primer satélite nacional llamado Fasat Alfa. Pero el proyecto –que fue lanzado desde un cosmódromo en Kazajistán- terminó en fracaso, ya que no se pudo separar del satélite madre.
Tres años después, lanzaron el Fasat Bravo; mientras que en 2011 fue el turno de Fasat Charlie, que ya cumplió su vida útil de cinco años.
Mientras que la Universidad de Chile lanzó en 2007 el nanosatélite Suchai, que dio 7.836 órbitas a la Tierra y que quedó inactivo a fines del año pasado.
El equipo espacial del plantel estatal sigue trabajando con los datos de Suchai. Asimismo, ahora preparan el lanzamiento de Plantsat en 2020, con el que buscan mantener viva una planta en el espacio.