En enero de 2018, la prestigiosa Universidad de Yale estrenó un curso que se convirtió en el más popular de la institución con más de 1.200 alumnos inscritos.
Se trata de la clase “Psicología y Buena Vida”, la que busca enseñar cómo ser feliz y en la cual se inscribieron uno de cada cuatro alumnos de la casa de estudio. Tal fue su impacto, que se debió mover las clases al principal auditorio de la institución para generar suficiente espacio para todos los alumnos.
Según señaló Laurie Santos, psicóloga y docente a cargo del ramo, al periódico Yale Daily News, “el objetivo principal del curso es que los estudiantes aprendan la ciencia de la felicidad y pongan en práctica esa ciencia”.
El curso –llamado oficialmente Psyc 157-se centra en entregar los conceptos fundamentales de la psicología positiva, área científica que estudia la felicidad y el bienestar. “Gran parte del curso abarca la comprensión de nuestros conceptos erróneos sobre lo que nos hace felices y por qué nuestra mente los genera”, indicó Santos.
De esta manera, la experta explicó que se revisa “la información sobre lo que realmente nos hace más felices y usamos ‘reconexiones’ (pequeños ejercicios para establecer nuevas conexiones cerebrales vinculadas con hábitos) para poner en práctica estos nuevos objetivos“.
Cabe señalar que Santos dijo al The New York Times que el curso no se volvió a hacer debido a los problemas administrativos provocados.
Sin embargo, el material usado fue condensado en una serie de seminarios que se dictan gratis en la plataforma online educativa Coursera bajo el título de La Ciencia del Bienestar.
Una vida más feliz
Las clases eran dos veces por semana, donde se incluyen disertaciones, pruebas, un examen escrito a mediados del semestre, dos proyectos de investigación y un trabajo final sobre superación personal propia.
También el curso incluye la aplicación ReWi, donde los alumnos completaban “una serie de actividades y tareas orientadas a vivir una vida más feliz, saludable y resiliente”, según indica el programa. Por ejemplo, una tarea sería escribir en un diario las cosas por las que te sientes agradecido.
Laurie Santos cree que el interés que despertó su curso se debe a que los alumnos quieren un cambio en sus vidas. “Creo que los estudiantes se están dando cuenta de que su vida en Yale no es tan feliz como podría y quieren tomar medidas para cambiarlo”, dijo.
“Los estudiantes quieren tener una conversación sobre salud mental y los niveles de estrés en el campus, y lo que pueden hacer para mejorar las cosas, y creo que esta clase podría ser un catalizador de algunos cambios culturales positivos”, señaló.
El curso también se enmarca en las nuevas tendencias educativas que exploran las distintas universidades para llegar a los millennials.
Por ejemplo, en 2015 una de las clases más populares de la Universidad de Stanford fue Diseñando tu Vida, que enseñaba cómo tomar decisiones de vida importantes, ya fueran profesionales o personales.