La lluvia y granizo que se registró el mes pasado en la zona central podría repetirse en las próximas semanas y generar daños en la agricultura. Así lo proyecta el académico del Centro de Investigación y Transferencia en Riego y Agroclimatología (Citra) de la Universidad de Talca, Patricio González.
El académico explicó que si bien la lluvia en primavera no es poco usual, sí es anormal que se produzca en corto plazo y con mucha intensidad, como ocurrió el lunes pasado. Este fenómeno podría traer importantes consecuencias en la agricultura, particularmente por el granizo que cayó en la zona central.
El experto advirtió que los cultivos más afectados serán las cerezas, kiwi y pequeñas pomáceas como manzanas y peras. Además, advirtió que las lluvias combinadas con humedad tienen el riesgo de producir enfermedades fungosas en las viñas.
Pero además, González aseguró que este evento podría repetirse durante las próximas semanas.
“Nuestra recomendación es que los productores del campo tomen medidas necesarias para proteger sus frutos. Se espera que este evento pueda repetirse hoy y luego de la segunda quincena de noviembre”, señaló el académico.
¿Por qué se produjo?
Una nube denominada cumulonimbos, desarrollada sobre la zona central del país, fue la que provocó chubascos de moderada intensidad y granizo en parte de la zona central.
“Esta nube se genera en condición de calidez. Se produce rápidamente pero se disuelve de la misma manera en la que aparece. Tiene un sentido vertical amplio y por tanto genera granizo y tormentas eléctricas”, afirmó González.
Según el experto, el evento guarda relación con el inicio del fenómeno El Niño en la zona ecuatorial, el cual altera el régimen pluviométrico de las estaciones invierno y primavera.
“En Santiago, como la ciudad está en la precordillera, esta nube tuvo un mayor desarrollo vertical y por ende produjo tormenta eléctrica y granizo. Mientras la nube sea más alta, mayor es su intensidad”, explicó González.
Efectos en el empleo
El granizo provocó estragos en muchos cultivos, incluso llegando a dejar pérdidas totales. El ministro de Agricultura, Antonio Walker, visitó las zonas afectadas, principalmente en la Región de O’Higgins, para cuantificar los daños.
“Estamos muy preocupados (…) Muchos de estos huertos al ser granizados van a tener que dejar su producción para el mercado interno y aquí estamos viendo que vamos a perder empleos de trabajo. Habrá un efecto en el empleo a corto plazo y también en las cosechas“, aseguró Walker.
“El tema es sumamente grave,tenemos productores que han perdido el cien por ciento de su producción y los efectos han sido devastadores”, añadió el ministro.
Walker explicó que el daño en los cultivos ocurrieron cuando gran parte de la inversión ya estaba realizada por parte de los agricultores.
“A todos los agricultores perjudicados con este inusual fenómeno climático, quiero decirles que como Ministerio vamos a salir en su apoyo con todos los servicios del agro. Estamos en terreno evaluando los daños para tomar las mejores decisiones posible e ir en su apoyo!”, escribió en su cuenta de Twitter.