Hace más de 11 años que la Universidad Católica de la Santísima Concepción (UCSC) desarrolla un programa de formación que busca la reinserción social de los reclusos del Centro de Cumplimiento Penitenciario Biobío de Concepción (CCP Biobío).
A través del Instituto Tecnológico Sede Talcahuano, junto a la Dirección Regional de Gendarmería, la primera carrera que impartió la UCSC fue Técnico Universitario en Construcción, que tuvo cuatro promociones. Ahora, con el apoyo de Sodexo, se sumó la carrera Técnico Universitario, que sumando a la otra opción formativa ya contabilizan 60 titulados.
Andrés Varela, Prorrector de la UCSC, detalló que esta formación “contempla el aspecto técnico, que les permite trabajar en empresas de alimentación, casinos, etc., y la formación valórica que siempre transmite a sus estudiante la Universidad Católica de la Santísima Concepción. Ambas son un complemento necesario para un buen ejercicio de una actividad técnica o profesional”.
Desde el inicio del programa han participado un total de 200 internos. Los aspirantes son seleccionados de acuerdo a su rendimiento en la enseñanza media, situación socioeconómica y conducta. El programa dura dos años e incluye una práctica profesional. Este 2018, son 27 los alumnos que iniciaron sus actividades al interior del recinto penal, quienes se suman a los 16 de segundo año.
Sobre la iniciativa, el director regional de Gendarmería, Coronel Christian Alveal, señaló:
“Este tipo de actividades dan cuenta de la preocupación del Estado y del Ministerio de Justicia por transformar los espacios carcelarios en espacios de oportunidades, integración y entregar herramientas que permitan reinserción”. Asimismo, agregó que “la reincidencia delictual disminuye drásticamente con este tipo de iniciativas”.
“Un buen futuro el día de mañana”
Entre los 27 internos que entraron este año a cursar la carrera de Técnico Universitario en Alimentos, se encuentra Pablo Cifuentes (28), quien posee una condena de 10 años.
Cifuentes valoró el hecho de poder estudiar y señaló que “la oportunidad que se me dio es la de tener un buen futuro el día de mañana, a través de estos estudios. Además, puedo provechar en este estado, privado de libertad, me sirve lo que estoy haciendo, porque quiero tener un oficio, poder surgir y poder trabajar en lo que estoy estudiando”.
Aldo Grillo, quien comenzó su segundo año de esta carrera, indicó que se trata de “una experiencia bastante positiva, en todo punto de vista. Estar privado de libertad, y que te den la posibilidad de estudiar, ha sido importante, porque entrega herramientas para enfrentar la sociedad con estudios de nivel”.